miércoles, 25 de noviembre de 2009

El cuento del pastor y las cabras

Creo que todos habremos escuchado alguna vez la historia de aquel pastor...Sí, ese que para matar el aburrimiento se ponía a gritar aquello de:¡Que viene el lobo! Y, claro, cuando tuvo bien hartos a todos sus convecinos de escucharle gritar y reirse de quienes acudían en su ayuda ya nadie creyó en sus gritos de alerta. Pero llegó un día en el que el lobo vino y nada más se supo del pastorcillo gracioso.
Ahora puede que estemos viviendo el inicio de un cuento parecido. Aquí el protagonista no es un pastorcillo sinó un zapaterillo, que lleva tiempo gritando y alertando sobre cosas bien diversas y al que cada día menos le creemos. Y resulta que dicho zapaterillo empieza a gritar que se va el monstruo. Y lo cierto es que el monstruo en cuestión lo tenemos bien encima, puede que realmente esté empezando a moverse lentamente, apartándose de sus víctimas. Pero claro, como el que empiece a gritarnos que el monstruo se va sea el mismo a quien ya casi nadie cree, puede suceder que la gente siga refugiada, sin tan siquiera abrir los ojos. Y a lo mejor hasta puede que llegue el día en que el monstruito en cuestión se vaya y seamos los últimos en darnos cuenta de su marcha... Habrá que tener los ojos bien abiertos y no hacer mucho caso de lo que unos u otros griten.

No hay comentarios:

Publicar un comentario